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domingo, 11 de marzo de 2012

OTRO ENIGMA DE LAS SIERRAS CUARCÍTICAS EXTREMEÑAS: Scrophularia arguta

Scrophularia arguta. Sierra de Santiago, Cáceres.


Uno que todavía no sale de su asombro cada vez que se cruza con un Erodium mouretii por las sierras del centro de Badajoz, o por la también cuarcítica sierra de San Pedro, ahora ve con verdadera congoja como el enigma, lejos de resolverse, se multiplica.

También en zonas de cantil y también asociado a la presencia de grandes nidos, un patrón que comparte con el Erodium, ahora se trata de la Scrophularia arguta, de la que desde hace pocos años se sabe que hay dos poblaciones en la Sierra de Santiago (Cáceres), a la que añadiría un ejemplar localizado en otro cantil, junto a un nido de Alimoche, en la parte cacereña de la Sierra de San Pedro. Los canarios la conocen como Ortiguilla mansa, que es un nombre más que apropiado. Recuerdo que la primera vez que me crucé con ella había comenzado a brotar y aún no había florecido, como no lo tenía muy claro toqué sus hojas para ver si realmente era una ortiga. Afortunadamente era la Scrophularia.

¿Qué es lo que hace tan singular esta presencia entre nosotros, si ya en 1851 Bourgeau la citó en la sierra de Gádor? Bastará decir que, además de estas poblaciones cacereñas, en Europa sólo se conocen otras 6 poblaciones en Murcia, Granada y Almería, todas a más de 500 km y, si no me equivoco, sobre terrenos calizos y más áridos. Además, ninguna de estas poblaciones supera los 1000 individuos. Su distribución en el resto del mundo abarca las islas Canarias, Cabo Verde, islas Salvajes, norte de África, algunas islas del Índico y Arabia.

Surgen rápidamente las tres hipótesis clásicas para estos casos: la primera la de la distribución relicta, la segunda la de la introducción humana y la tercera la de una dispersión fuera de lo común.

Aunque se la trata como anual en todas las referencias que he leído, yo la verdad es que no lo tengo muy claro. Emite brotes de raíz en otoño y se pueden apreciar plantas de distinto tamaño, con más o menos número de tallos en función de su edad, como en otras escrofularias perennes. También es una planta anficárpica que emite flores en la parte aérea que son polinizadas por insectos y otras en la parte subterránea que se polinizan sin abrirse y dan lugar a frutos subterráneos.

Dado lo precario de su situación, con una superficie total de ocupación de unas 5 hectáreas en toda la Península Ibérica, sería bueno dedicar algún esfuerzo a su conservación, no vaya a ser que nos encontremos ante otra reliquia desaparecida.

6 comentarios:

  1. Es muy bonita, no conocía esta planta. Gracias por toda la información.
    Un fuerte abrazo

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  2. Es preciosa y la imformacion muy grata un saludo.

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  3. Así me gusta, como Santo Tomás, que los dedos no engañan. Aunque también hay que tener cuidado con lo que se toca... Besos.

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  4. ¡¡¡Qué pasada!!! no, si voy a tener que ir por el campo teniendo cuidado de por donde piso, no vaya a ser que me cargue una especie relicta!!
    Interesantísimo.

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  5. Fascinante como siempre y especies dignas de todos los cuidados.
    Desde que te leí por primera vez sentí que tus textos causan adicción así que no te extrañe me asome por aquí!
    Espero que estéis muy bien, felicidades y abrazos.

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